Juan Zepeda, el candidato inesperado.
Dentro del tumulto ocasionado por las cercanas elecciones en el Estado de México hay una imagen que destaca en mi mente. La del candidato del PRD, Juan Zepeda, parado al lado de una gran motocicleta negra con manubrios alados, usando una chamarra de cuero y lentes de sol rodeado de sus partidarios. Más allá de lo extremadamente inusual de la imagen, lo que resalta es lo natural que parece ser este ambiente para Zepeda, no hay tensión, ni actuación sino una honesta convivencia con las personas que busca gobernar. Y es aquí cuando se puede ver todavía debajo del candidato político al mexicano que nació en las calles del municipio de Nezahualcóyotl y que en su vida adulta ayudo a volverlas más seguras como su presidente municipal durante el periodo del 2013 al 2015.
Los problemas a enfrentar en el Estado de México como el alto índice de secuestros, feminicidios, pobreza o falta de infraestructura no le son ajenas a la mayoría de los mexicanos, todos hemos visto numerosas primeras planas, artículos en línea, etc. que muestran que la realidad de este estado no es sostenible. Juan Zepeda no sólo los conoce sino que tuvo que vivir con ellos hasta que tuvo que dejar México y cruzar ilegalmente a los Estados Unidos, pero también muestra que estos problemas no son insuperables. En una campaña en dónde la principal herramienta a sido la calumnia y el escándalo, Juan Zepeda se ha enfocado a introducir propuestas que pueden mejorar al Estado de México.
El gobierno que busca Zepeda incluye a todos los mexiquenses y lo demuestra siendo el único de los tres candidatos que lideran las encuestas que se ha manifestado públicamente a favor de los derechos de la comunidad LGBTTI, además es partidario de la mujer y su poder de decisión sobre su cuerpo al inclinarse hacía la legalización del aborto.
En los últimos 80 años el Estado de México es uno de los pocos estados en los que no se ha dado una transición de poder del PRI desde los tiempos en los que este fuera el partido hegemónico en México, pero actualmente el PRI vive una de sus peores crisis de los últimos años y el Estado de México es una de sus mejores oportunidades para mantenerse en el poder. Sin embargo vivimos en tiempos donde la política se ha vuelto no convencional, donde el candidato inesperado, esta tendiendo a ganar la carrera. Juan Zepeda a probado que para estas elecciones el puede ser nuestro candidato inesperado, aquel que salió de la nada y cambio el panorama para todos.